Desde 1999 he estado involucrado en los procesos electorales de la Asociación de Cronistas de Arte, y siempre se suscitan ataques entre los propios compañeros, algo que siempre me ha preocupado.
No es un secreto que apoyo a Cristina, a quien siempre le digo que la mejor campaña es mostrar un plan de trabajo y olvidarse de chismes y ataques que en nada aportan al proceso, y por eso sigo abogando, aunque no lo logre.
Pero hablando de Cristina, la apoyo, no porque sea mi compañera de trabajo de 15 años en este diario, sino por su entrega, su bondad y su seriedad.
Hablar de Cristina es hablar de una luchadora incansable, que después de su familia ama profundamente su profesión como ninguna otra cosa y por ende al gremio que agrupa a quienes día tras día ejercen la crónica de espectáculo.
Cristina Liriano sería una de las mejores cosas que le podrían pasar Acroarte en este momento, porque siempre ha estado dispuesta a escuchar las voces de los cronistas.
Tras haber ayudado a cuatro compañeros a lograr la presidencia de la institución, ahora le llegó su turno, y estoy seguro que lo hará bien, porque ya lo demostró como Secretaria General en el período 2013-2015
Los miembros de Acroarte tendrán la oportunidad de elegir a una mujer solidaria, leal y preparada para enfrentar los retos que ha de tener por delante en los próximos dos años.
Tenemos un compromiso de mantener Acroarte unida bajo el manto de la institucionalidad en donde nuestra bandera sean siempre los estatutos y así podremos mantener la confianza que nos hemos ganado ante la sociedad dominicana.
Fuente Fausto Polanco
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