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jueves, 5 de septiembre de 2019

Elvis Crespo: “Dios quería que yo fuera merenguero”




Sus sueños truncados de ser pelotero e integrante del grupo juvenil Menudo no detuvieron el deseo del cantante Elvis Crespo de convertirse en una figura relevante en el mundo del entretenimiento latinoamericano.

Durante su juventud se involucró en las ligas infantiles de su sector y creó “Los Orioles de Elvis Crespo”; de sus manos salieron peloteros de Grandes Ligas como Enrique J. Hernández, Xavier Cedeño y Alex Ríos, entre otros. Pero el reconocido puertorriqueño es muy respetuoso de la voluntad de Dios y está consciente que “cuando las cosas no salen como las quiere se deben escuchar los mensajes de la vida que te están llevando por otros caminos. Dios quería que yo fuera merenguero”.

“Ver que pude contribuir con la niñez de mi país, crear amigos, espiritualmente me llena mucho, encontrarme con ellos ahora y que me agradezcan todo lo que hice por ellos me llena de mucha emoción”, dijo Elvis Crespo Díaz en una entrevista con elCaribe.
La pasión por el merengue le llegó al lado de Toño Rosario, mientras Crespo era integrante de la integrante de la orquesta de artista dominicano, quien estuvo antento a sus interpretaciones, pero, sobre todo, observaba su desempeño como líder. “Soy una esponja…, aprendí mucho con Toño, estoy agradecido con Dios y con él que me haya permitido ser parte de su orquesta”, sostuvo el popular cantante.

Pese a que la vida del intérprete de éxitos como “Tu Sonrisa”, “Luna llena” y “Píntame”, entre otros, ha sido “hermosa”, también ha tenido que enfrentar situaciones que lo ha llevado a reflexionar.

Reconoce que cuando alcanzó su éxito mundial con el disco Suavemente, no estaba a la altura de la circunstancias porque sus expectativas, cuando se lanzó como solista, eran pequeñas, pero que su talento lo llevó a lugares que él nunca pensó. “Eso enriqueció mi ego y no tuve la madurez espiritual, intelectual y profesional para asimilar eso, y tomé decisiones que enriquecieron mi ego. Fui una persona egoísta, el orden de prioridad estaba distorsionado (…), en aquel momento era mi carrera, mi familia un poquito, mi carrera y Dios cuando se me trancaba el bolo”, confesó.


Fuente  Externa .

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