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miércoles, 1 de octubre de 2014

“Los mejores bikinis de Kim Kardashian”


             
¿Quién no ha caído alguna vez en un titular-anzuelo como éste? Quizás no hayas oído hablar del sitio web Taboola, pero sus contenidos posiblemente te resulten familiares y hasta algo irritantes.
“La polémica píldora adelgazante que arrasa en Reino Unido”, “15 inconvenientes de ser mujer”, “Nueve personas que en serio no vas a creer que realmente existen”, “¡Cuidado! no veas esto con tu mujer”.
Si alguna vez te has encontrado con titulares como éstos llamándote desde la pantalla, entonces seguramente estés familiarizado con el tipo de trabajo de esta compañía.
Taboola es uno de los principales proveedores de historias patrocinadas para páginas web de noticias y chismes.
Con frecuencia los titulares más tentadores apelan a bajos intereses compartidos y las fotos que los ilustran a menudo incluyen celebridades o mujeres en bikini (o ambos combinados).
Los críticos han calificado el contenido de Taboola y de las páginas rivales del mismo estilo, como Outbrain, por ejemplo, como “basura”, “cebo para ganar clics”, “degradante”, “representante de lo peor de nuestra raza”, entre otras descripciones igualmente despectivas.
Pero lo cierto es que cada mes 400 millones de usuarios de todo el mundo hacen clic en los vínculos de Taboola.
Y el negocio, que fue fundado en 2007, ahora disfruta de ingresos por valor de US$250 millones al año.

Publicidad de fondo

Taboola, esencialmente una compañía de publicidad digital de alta tecnología, fue establecida por el israelí Adam Singolda, poco después de haber pasado casi siete años trabajando como oficial de encriptación para las Fuerzas Israelíes de Defensa.

Fuente  Externa

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