El 8 de septiembre de 2002 marca un antes y un después en la vida de Laura Hernández y lo vivido desde ese momento ha quedado plasmado en su primer libro titulado “De la prisión a la libertad” que recién acaba de llegar al mercado.
Para Hernández, echar un vistazo a todo lo ocurrido le permite demostrar cómo esos sucesos dolorosos cambiaron su vida y le han ayudado a vivir una vez salió en libertad luego de tres años en una prisión en República Dominicana extinguiendo una pena por cargos de narcotráfico. Los sucesos se remontan al 2002 cuando Hernández fue arrestada junto a su exesposo Marcos Irizarry y otras seis personas
“Este libro narra cómo lo perdí todo en un segundo. Todo lo que había luchado de manera material, pero fue mucho más que eso, fue la parte emocional. Mi espíritu se apagó en un momento dado a causa de todo esto. Caí en lo más bajo, en lo más profundo, encarcelada por tres años injustamente”, comentó la comunicadora y empresaria durante un “in store” en una de las sucursales de las tiendas Sam’s Club. Ante cerca de una decena de clientes que compraron su libro y varios curiosos que pararon al verla, Hernández destacó que hay cuatro aspectos importantes que quiso destacar en el libro. El primero es el amor incondicional de su mamá, Amelia Pérez Guzmán, quien se encontraba en la tienda apoyando a su hija. La periodista resaltó la “lucha incansable” de su progenitora ella para sacarle de la prisión, “estando 100% segura de mi inocencia en todo momento”.
También destacó como otro punto importante del libro la visita que le hizo su amigo, el cantante Manny Manuel, quien le hizo un regalo que le cambió la vida para siempre.
“Quiero que lean y le den importancia a esas cosas que hay en el libro. También destaco la visita de miles y miles de puertorriqueños que viajaron tan lejos, porque aunque es un viaje corto en avión, salieron de un país para visitarme. Viajaron para ir a ver a una figura pública pero que realmente no conocían en persona. Esas visitas lograron que yo no me convirtiera en una persona amargada y llena de dolor”, aseguró.
Como cuarto punto importante, Hernández destacó que en el libro también habla de cómo pudo romper el patrón de maltrato en el que se vio envuelta por tantos años sin darse cuenta.
“Esas son las cosas que para mí tienen valor en este libro y son la razón por la que publico este libro. Esas cuatro historias tienen un denominador común y es Dios, quien siempre estuvo presente en mi vida, estuvo guiando mis pasos cuando yo ni siquiera me daba cuenta”, aseguró.
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