En pleno Halloween, Raúl De Molina se espantó por el precio de los conciertos, y Lili Estefan por el de los zapatos… Sí, el horror no era ni por fantasmas, ni por cuánto cuesta la leche o algún producto de la canasta básica de alimentación.
El tema era el regreso de los conciertos después del inicio de la pandemia, y cómo es increíble que estén ‘sold out’ con los precios que tienen.
“700 o mil dólares por un concierto de tres horas“, repetía y repetía Raúl de Molina a su compañera, quien trataba de conciliar la situación, pero El Gordo seguía con el tema, y aseguró que prefería mejor gastarse esa cantidad de dinero en tres platos de un buen restaurante.
Lili, como suele hacerlo, se burló y dijo que De Molina solo piensa en comida, pero ella no se quedó atrás, ¿pues con qué comparó el precio de los concierto? ¡Con los zapatos!
La Flaca confesó que ella tuvo que dejar de comprar zapatos por los precios elevados de los mismos, casi como ir a un concierto.
La verdad que no dudamos que Raúl prefiera ir a comer que a un concierto, lo que sí nos parece difícil de creer es que Lili haya dejado de comprar zapatos, de hecho no solo todos los días la vemos con unos diferentes, sino que ha confesado, en más de una oportunidad, que el cuarto más grande de su casa es su closet.
Hace unos 8 años confesó que tenía 101 pares de zapatos, algo que no dudamos se haya incrementado en todos estos años.
Así que si te encuentras a Raúl o Lili en algún concierto, ten por seguro que están usando tickets de cortesía, porque lo dos aseguraron que en sus vidas de lujo, los boletos al precio actual no está contemplado dentro de sus presupuestos.
Fuente Externa .
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