El reconocimiento que la Cámara de Diputados aprobó en diciembre del año pasado a la trayectoria artística y el aporte al arte dominicano Anthony Ríos se quedó sin ejecutar tras la muerte del cantante esta tarde.
La resolución del diputado de Hato Mayor, Venerado Castillo, tardó dos años en ser aprobada, ya que era dejada “sobre la mesa” en incontables ocasiones.
En noviembre del año pasado, previo a ser sometida a votación hubo un altercado memorable cuando el diputado por San Cristóbal Manuel Díaz se opuso bruscamente, alegando que la conducta que tuvo en vida y sus valores no eran propios de una persona orgullo del país, como pretendía la resolución enaltecer al cantante.
“Es una figura nuestra, una gente que ha dado mucho por nosotros, pero su conducta y valores producto de su formación, quizás de hogar o académica lo hacen actuar como una persona reguetonera o de un barrio del bajo mundo”, expresó Díaz durante una sesión en la Cámara.
“El que quiera votar a favor de esa resolución por estar de alcahuetes, por no decir de lambones que voten, pero yo Manuel Díaz no lo hago, tal vez cuando muera porque ya no habrá huellas ni hechos que le tengan que reclamar”, manifestó en esa ocasión.
El reconocimiento que la Cámara de Diputados aprobó en diciembre del año pasado a la trayectoria artística y el aporte al arte dominicano Anthony Ríos se quedó sin ejecutar tras la muerte del cantante esta tarde.
La resolución del diputado de Hato Mayor, Venerado Castillo, tardó dos años en ser aprobada, ya que era dejada “sobre la mesa” en incontables ocasiones.
En noviembre del año pasado, previo a ser sometida a votación hubo un altercado memorable cuando el diputado por San Cristóbal Manuel Díaz se opuso bruscamente, alegando que la conducta que tuvo en vida y sus valores no eran propios de una persona orgullo del país, como pretendía la resolución enaltecer al cantante.
“Es una figura nuestra, una gente que ha dado mucho por nosotros, pero su conducta y valores producto de su formación, quizás de hogar o académica lo hacen actuar como una persona reguetonera o de un barrio del bajo mundo”, expresó Díaz durante una sesión en la Cámara.
“El que quiera votar a favor de esa resolución por estar de alcahuetes, por no decir de lambones que voten, pero yo Manuel Díaz no lo hago, tal vez cuando muera porque ya no habrá huellas ni hechos que le tengan que reclamar”, manifestó en esa ocasión.
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