El experto en reinas de belleza y presidente de la Organización Miss Venezuela, Osmel Sousa, negó que sea la cabeza de un negocio de prostitución con las chicas que participan del certamen, rumor que circuló por las redes sociales.
Según varios medios, entre ellos la página cibernética Últimas Noticias, el abogado venezolano Carlos Ramírez escribió en su cuenta de Twitter lo reseñado por el periodista Manuel Isidro Molina, que revela detalles sobre los presuntos negocios de prostitución que mantendría “el Zar de la Belleza".
Ante tales señalamientos, el también jurado del reality de Univision, Nuestra Belleza Latina, se expresó en una comunicación escrita:
En relación a las acusaciones falsas, que se han realizado en mi contra a través de diversos medios de comunicación, quiero aclarar que: En mis más de 40 años de trayectoria en el mundo de los certámenes de belleza, en ningún momento he incurrido en prácticas deshonestas, ni que vayan en detrimento de sus participantes. Mi objetivo dentro del mundo de la belleza, ha sido siempre el de brindar a las participantes una preparación integral, que les permita formarse y concursar con éxito en el ámbito internacional. No conozco a ninguno de los personajes vinculados con las difamaciones hechas en mi contra; ni al periodista que dio inicio a los rumores, ni a los personajes que señalan dentro de los mismos.
Éste no es el primer intento de difamación en contra mía surgido en los últimos días, ante la cercanía del Miss Venezuela 2015. Si bien, me he detenido a aclarar, cada uno de los falsos rumores sembrados en la opinión pública, por ningún motivo, me prestaré al inicio de polémicas ni escándalos, que únicamente pretenden desacreditar el trabajo de tantos años y a un símbolo venezolano, como lo es este certamen.
Actualmente, todos mis esfuerzos están enfocados en continuar brindando a mi país nuevos éxitos y mostrar al mundo, el talento y belleza de la mujer venezolana. No obstante, ante la insistencia en difamar y dañar mi imagen, me veo obligado a emprender acciones legales contra quienes difaman, sin presentar pruebas concretas, basando sus acusaciones únicamente en rumores.
Fuente Externa
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